Por Fast Check CL
Durante la mañana de este martes el Vaticano presentó el primer informe de la Comisión Pontificia para la Protección de Menores, órgano formado en 2014 a petición del Papa Francisco. El pontífice había solicitado un informe crítico de los procesos de investigación y sanción por abuso a menores en la Iglesia en 2022, y tras dos años de trabajo, esta semana el informe se hizo público.
El informe tuvo como objetivo recomendar procesos y estrategias para eliminar el encubrimiento a los abusos sexuales cometidos por sacerdotes y agilizar el proceso de renuncias y sanciones de quienes se vean involucrados en casos de esta índole. Además, se busca asegurar la protección de los menores que se han visto afectados al verse en calidad de víctimas.
Entre las personas que presentaron el informe en la Santa Sede estuvo el encargado de la comisión, el cardenal Sean Patrick O’Malley, Maud De Boer Buquicchio, el obispo Luis Manuel Alí Herrera, Teresa Kettelkamp y el chileno Juan Carlos Cruz, víctima de abusos del sacerdote Fernando Karadima, quien también participó en la elaboración del documento.
“Un informe que piensa en las víctimas y pone un foco enorme donde muchos quisieran que haya oscuridad”, afirmó Cruz al medio católico COPE.
“Se usan palabras que antes eran tabú en la Iglesia y se destapan historias y procesos que antes no se podían tener acceso”, agregó el chileno.
Este informe se basa en un estudio realizado en un mapeo de veinte iglesias locales durante las visitas “Ad limita” realizadas durante 2023, entre las que se encuentran parroquias en México y Colombia.
El texto puso énfasis en la autocrítica de la Iglesia en los procesos de investigación de casos de abusos a menores cometidos por religiosos y reclama más transparencia ante los datos recopilados y una rápida sanción en casos que se amerite.
¿Qué indicaciones relevantes realizó la Comisión para la Protección de Menores?
El documento de la comisión es el primer informe de ésta índole y se espera que se emitan nuevos textos por parte de la comisión durante los próximo años. En este caso, el documento se centró en criticar y proponer cambios en los procesos de investigación cuando hay denuncias por abusos sexuales contra menores en la Iglesia.
“Estamos muy preocupados por la dificultad que tienen las victimas por conseguir los informes de su propio caso”, señaló el encargado de esta comisión, el cardenal Sean Patrick O’Malley
“Hemos conversado esto, para iniciar alguna estructura que podría ayudar en esto, estamos iniciando un trabajo, pero una primera recomendación es la necesidad de tener mas comunicación con las posibles victimas”, agregó O’Malley en la conferencia de prensa que transmitió el Vaticano.
Por otro lado, busca darle relevancia a la vulnerabilidad en la cual se ven expuestas las víctimas, no solo menores de edad, sino que también adultos que denuncian.
Además, se solicita más rapidez ante la gestión de los casos de las víctimas y así evitar la revictimización. Ante esto, se pretende garantizar la agilización de cada caso informado, esclareciendo el rol de cada ministerio del tribunal Romano.
Y como método de reparación se solicitó el estudio de las medidas para poder indemnizar a los afectados.
“Nada de lo que hagamos será suficiente para reparar totalmente el mal que se ha hecho”, enfatizó el cardenal.