Fast Check CL conversó con la presidenta subrogante del Colegio Médico, Gisela Viveros, respecto a los recientes ataques contra consultorios. La dirigente gremial apunta a que se requiere un “plan de seguridad que contemple recursos que vengan del Ministerio de Interior destinados solamente a protección de salud”.
Por Valentina Caniupan
El pasado 26 de septiembre, se registró una balacera durante un velorio en el sector de Bajos de Mena, Puente Alto, en que resultaron heridos dos adolescentes de 11 y 13 años, y un tercero fallecido de 17 años.
Según se dio a conocer, los autores de la balacera persiguieron la ambulancia que llevó a los heridos hasta el Cesfam Raúl Silva Henríquez. En el consultorio, los delincuentes amenazaron al personal médico con “reventar” el centro en caso de que salvaran a las víctimas.
Este no es un caso aislado. El 27 de septiembre se registró el ingreso de un sujeto armado con la intención de rematar a un herido que era atendido en el Cesfam Granja Sur, en la comuna de La Granja.
Para conocer la visión del gremio al respecto, Fast Check CL conversó con Gisela Viveros, presidenta subrogante del Colegio Médico (Colmed).
“Lo importante es que ese plan de seguridad contemple recursos que vengan del Ministerio de Interior destinados solamente a protección de salud”
—¿Qué protocolos de seguridad están implementados en los Cesfam para proteger a los trabajadores del área salud?
La Ley Consultorio Seguro promulgada el año 2019, esa es la que tiene la finalidad de entregar mayor protección a los funcionarios de salud. Pero no es suficiente, la verdad los últimos años nos hemos estado enfrentando a situaciones que exceden a las actitudes que acostumbrábamos, por ejemplo, vinculadas a agresiones verbales o física en el contexto de atención de salud. Principalmente, determinadas por los tiempos de espera, lugares inhóspitos o en cuanto a la atención vinculada a la insatisfacción usuaria, la cual mezcla la precariedad del sistema de salud con la calidad de atención.
—¿Cómo se gestionan las amenazas de violencia hacia el personal de salud en situaciones críticas como la que ocurrió en Bajos de Mena?
Las agresiones que han sufrido funcionarios de salud es algo que el ministerio ha ido trabajando con protocolos y con plataformas de denuncias que permiten levantar un registro de cuáles son los centros asistenciales con mayor exposición a estas situaciones. Pero ante los hechos delictuales como el ocurrido en Bajos de Mena, creemos que sólo al sector de la salud le queda grande, y que el encargado de seguridad pública es el Ministerio de Interior.
Por eso nos reunimos con el subsecretario Monsalve, con quién estamos trabajando en conjunto con la Delegación de la Región Metropolitana para levantar un diagnóstico que pueda permitir identificar cuáles son los centros donde se concentran mayor hechos delictuales y así poder hacer un mapa de calor de los recintos de salud y poder empaquetar diferentes herramientas según el grado de peligrosidad.
“Lo más importante en cuanto a seguridad son los datos que nos puede brindar el Ministerio de Interior”
—¿Existen mecanismos de coordinación entre los centros de salud y las fuerzas de seguridad para responder a incidentes de violencia?
Si, el Colegio Médico asiste y hemos exigido participar de las mesas de seguridad. También hay una indicación desde el Ministerio del Interior para que los delegados presidenciales de cada región participen de esas mesas. La verdad es que hoy en día las mesas de seguridad cortan muy poco y hay experiencias generalizadas. Hay mesas que inician con mucho ímpetu, pero que prontamente se van volviendo más laxas y pocos resolutivas.
Lo que sí tenemos es la experiencia del Servicio de Salud Metropolitano Occidente generada por la jefa de servicio, la doctora Daniella Greibe, que ha logrado trabajar de manera metódica y ordenada, como pioneros establecieron una especie de estandarización de sus centros en los que se clasifican como: alto, mediano y bajo riesgo. Es una metodología que nosotros estamos tratando de poder replicar en el resto de otras mesas de seguridad.
—¿Ustedes como Colegio Médico realizan capacitaciones los trabajadores de salud para manejar situaciones de riesgo o violencia?
El Colegio Médico como parte de su seguro de responsabilidad legal está a cargo del Falmed, cuya finalidad es brindar asistencia legal. Éste tiene una capacitación al personal de salud en agresión, y se realiza frecuentemente a lo largo del país a cualquier colega que lo puede solicitar. Además, tiene la posibilidad de acceder a asesorías legales en caso que sea necesario.
La capacitación consiste en hacer uso de los protocolos del sistema de salud existentes y reforzarlos debido que suele ocurrir que se desconoce mucho sobre los protocolos locales de agresiones. Esto ayuda al personal a cómo enfrentarse ante un hecho de violencia.
Pero yo creo que eso actualmente queda muy por debajo para contener los episodios que hemos visto los últimos días, donde requerimos de un nivel de intervención mayor a lo que existe actualmente.
—¿Se han documentado otros incidentes de violencia en centros de salud en otras regiones aparte de la Metropolitana?
En lo que va de este 2024 se han reportado en la Región Metropolitana tres eventos emblemáticos de agresiones más graves en consultorios, uno de ellos fue el Cesfam Ana María Jurisic de Maipú a inicios de año y los dos recientes que los cesfam de La Granja y Bajos de Mena.
Ahora, también existen casos de este año de alto nivel de violencia en Iquique, en la comuna de Alto Hospicio, y en San Pedro de la Paz, en el sector que se llama Boca Sur, el centro asistencial de Concepción.
—¿Se planea realizar una revisión de los protocolos de seguridad existentes en todos los centros de salud en región?
Nosotros ya contamos con dos informes uno relacionado con la evidencia disponible a las agresiones del personal de salud a nivel mundial que se realizó el año pasado y el otro es un diagnóstico de agresiones al personal de salud por centro asistencial.
Éstos muestran cuál es el personal que mayor sufre las agresiones que no necesariamente son los médicos, sino que en general es el personal administrativo que se encuentran en la primera cara de atención.
Actualmente, estamos en planificación de un tercer informe actualizado para el próximo año. Sin embargo, no queremos tampoco duplicar fuerzas porque nos parece que lo más importante hoy en cuanto a seguridad son los datos que nos puede brindar el Ministerio de Interior. Finalmente, son ellos los que manejan los reportes de delincuencia, y así continuar levantando información en cuanto a agresiones del personal de salud.
—¿El personal de salud recibe apoyo posteriormente para afrontar el estrés o el trauma derivados de situaciones de violencia?
Si, lo que corresponde es que ellos reciban ayuda por la mutualidad es parte del protocolo en caso de que presenten alguna lesión física o mental luego de estos episodios de violencia.
“Lo más importante es que se establezca un programa de seguridad en los centros de salud, que podría estar dentro de la Ley de Infraestructura Crítica”
—¿Existen planes para establecer redes de comunicación más efectivas entre los trabajadores de salud y las autoridades para reportar amenazas o incidentes?
En el caso del Colegio Médico nosotros procuramos contactarnos con el funcionario que fue agredido, ayudamos con la abogacía y ser la voz de quienes lo están sufriendo. Pero a nivel de la autoridad desde la Delegación Presidencial nos hablaron de protocolos que tienen para garantizar presencia policial en estos casos particulares, que no han entregado de manera formal, y que la verdad no sabemos muy bien que tan formalizados están, porque en estos últimos casos no funcionó.
—¿Qué planes a largo plazo debiesen ser considerados para mejorar la seguridad en los centros de salud públicos?
Nosotros creemos que a largo plazo lo más importante es que se establezca un programa de seguridad en los centros de salud, el que podría estar inmerso dentro de la Ley de Infraestructura Crítica. Pero lo importante es que ese plan de seguridad contemple recursos que vengan del Ministerio de Interior destinados solamente a protección de salud.
La ministra Aguilera comprometió recursos de salud para ello. La verdad es que nosotros no vemos cómo va a poder eso posible ante la gran precariedad que tenemos en contratación de personal para la situación de las listas de espera. Lo que esperamos es que exista un presupuesto destinado a seguridad que pueda emanar desde el Ministerio del Interior.