Por 脕lvaro Marchant
El viernes pasado, en una columna de opini贸n publicada en El Mercurio, un grupo de m茅dicos denunciaron que centros de salud no cuentan con ketamina, utilizada para tratamientos psicol贸gicos.
Ante el emplazamiento de los profesionales por la falta de ketamina, desde la Central de Abastecimiento del Servicio Nacional de Sistemas de Salud (CENABAST), argumentaron en el mismo medio, que esto se deb铆a a que el laboratorio a cargo de proveer el medicamento hab铆a dejado de producirlo.
Laboratorio Sanderson S.A era el encargado de proveer ketamina a los centros de salud desde 2015. Seg煤n los registros de compra de CENABAST, en 2023, la orden de compra fue de $48 millones, alcanzando para 41.140 unidades.
Por otra parte, hasta el martes 24, solo exist铆a una orden de compra realizada a Laboratorio Sanderson S.A el 31 de enero de este a帽o, por un monto de $9.597.499 millones, los que se traducen en 6.030 unidades anuales.
Sobre la diferencia entre un a帽o y otro, desde CENABAST respondieron a Fast Check Cl que “tras declararse desierta la licitaci贸n p煤blica de ketamina debido a la falta de oferentes, la Central procedi贸 a realizar una compra directa en plaza a Laboratorios Sanderson, que dispon铆a de unidades limitadas, dado que este proveedor hab铆a informado la suspensi贸n indefinida de la fabricaci贸n del producto”.
Por otra parte, explicaron que ante ese escenario, Cenabast debi贸 optar por importar ketamina a la Organizaci贸n Panamericana de la Salud. Esta compra apareci贸 en el portal de Cenabast este jueves y corresponde a la compra de 85.010 unidades de ketamina por $90 millones.
Un problema que sigue
Desde la CENABAST confirmaron a Fast Check que el medicamento se encuentra disponible desde septiembre de este a帽o, sin embargo, su repartici贸n no se ha podido concretar debido a que necesita diversas aprobaciones por parte de las autoridades sanitarias.
En una carta publicada este jueves en El Mercurio, el director de CENABAST, Jaime Espina, explica que “en nuestro compromiso por fortalecer la autonom铆a del sistema de salud, hemos registrado diversos productos bajo la marca CENABAST, como suero y agua est茅ril para inyectables, que han enfrentado problemas de suministros en el pasado.
El psiquiatra y profesor asociado de la U. de Chile, Paul Vohringer ha sido uno de los m茅dicos que levantaron la alerta de falta de medicamentos. El profesional confirma a Fast Check que en tiempos de pandemia la soluci贸n moment谩nea propuesta por la central si rindi贸 frutos, “eso es real, efectivamente funcion贸”.
Pese a la respuesta de la central, Vohringer afirma que hasta el d铆a de hoy a煤n no reciben ninguna ayuda concreta. En la misma l铆nea, afirma que desde la central les comentaron que la repartici贸n de medicamentos se realizan los 15 de cada mes.
“Hasta hoy d铆a no hemos recibido ninguna respuesta de CENABAST. Entonces, es un chiste en el fondo, dada la urgencia que tenemos, esperar tres semanas m谩s para que empiecen a despachar el medicamento”, subraya Vohringer.
Robo de ketamina y falta de proveedores
La central ha comentado en m谩s de una ocasi贸n que el desabastecimiento del medicamento se debe a que Laboratorios Sanderson dej贸 de producir el medicamento.
Ante esto, el profesor asociado de la U. de Chile comenta que “medicamentos como estos y su mercado no pueden quedar en manos exclusivamente de privados. No puede ser que no hayan m谩s proveedores”.
A lo mismo agrega que “el se帽or Sanderson se aburri贸 porque le estaban robando los camiones, que los narcos y dijo, de un d铆a para otro, ‘se acab贸 la ketamina’ y quedamos sin medicamento. Eso no puede ser”.
Laboratorio Sanderson y su pasado judicial
El Laboratorio Sanderson, el cual desde 2015 era el encargado de proveer de ketamina al sistema p煤blico, tuvo un amplio proceso judicial que termin贸 con la Corte Suprema conden谩ndolos por colusi贸n en licitaciones p煤blicas.
Dicho caso finaliz贸 con el laboratorio Fresenius Kabi Chile y su filial Sanderson condenados por haber mantenido un cartel para afectar licitaciones p煤blicas impulsadas por CENABAST entre 1999 y 2013. En particular, el il铆cito se habr铆a producido para quedarse con licitaciones relacionadas a medicamentos inyectables de menor volumen, por ejemplo “ampollas”.
En ese entonces, la FNE solicit贸 multas por 18 mil Unidades Tributarias Anuales (UTA) para Laboratorios Sanderson y 2.000 UTA a Fresenius Kabi Chile, sanciones que fueron reafirmadas por el m谩ximo tribunal.
Fast Check CL consult贸 a CENABAST por qu茅 luego de la condena interpuesta por la Suprema se siguieron efectuando contratos con dicho laboratorio y la respuesta fue que “en este caso, la ley no les proh铆be participar de los procesos licitatorios del Estado, por lo que no es posible excluirlos”.
