Este miércoles se dio a conocer la muerte de la histórica dirigenta de trabajadoras de casa particular, Ruth Olate, producto de un cáncer. Olate fue la impulsora de la ley que desde el 2015 rige a las trabajadores de cuidados domésticos y por diez años dirigió el sindicato que agrupa a su sector, Sintracap.
Durante la mañana de este miércoles, se dio a conocer la muerte de la dirigenta sindical Ruth Olate, quien representó por años a las trabajadoras de casa particular en el Sindicato de Trabajadoras de Casa Particular (Sintracap).
Olate falleció anoche producto de un cáncer que padecía desde el 2016, en el domicilio donde vivía en Santa Juana, en la Región del Biobío.
La dirigenta llegó en 2006 a Sintracap y desde el 2008 hasta el 2019 fue presidenta de la organización, dedicada a defender los derechos de las trabajadoras de casa particular, ya sea puertas adentro como externas.
Una vida de trabajo
Ruth Olate comenzó a trabajar cuando tenía 12 años en la limpieza y el cuidado de casas particulares, lo que coloquialmente se conoce como “nanas” en Chile. Como su labor era puertas adentro, nunca se preocupó de ser propietaria de una vivienda, por lo que cuando comenzó a ser dirigenta de Sintracap, vivía en la misma sede sindical.
«Lo más triste de este trabajo fue el encierro. Uno dice que es lo que le tocó. Pero, yo no lo logro entender el sistema, los malos sentimientos, el no ponernos en el lugar de la otra persona. Así que lo que más me marcó a mí fue estar sola, el estar encerrada en mi propio mundo, por no saber que había gente afuera que era tal como yo», señaló en una entrevista en Sindical.cl en 2014.
«Yo vi mucho maltrato psicológico y físico, incluso donde uno trabaja. Así que dije: nunca voy a traer hijos al mundo a sufrir, porque yo no he sido feliz. Mucho menos soltera. Así que no me postergué por nadie, no tener familia fue un decisión que tomé consiente», agregó en la misma entrevista.
Como dirigenta, partió trabajando en la Asociación Nacional de Empleadas de Casa Particular, Anecap, pero ya en 2006 se afilia a Sintracap. Desde allí, durante el primer gobierno de Michelle Bachelet, el sindicato impulsó que a las trabajadoras domésticas se les reconociera el derecho a tener un salario mínimo y un día libre a la semana.
«Nuestro trabajo no es indigno, las condiciones laborales son las indignas. Si nosotras no estuviéramos en las casas, cómo estarían esas casas. Nosotros necesitamos tanto al empleador, como ellos a nosotras. Si no estuviéramos trabajando, difícilmente las mujeres podrían desarrollarse en el área profesional, así que indirectamente somos un gran aporte al país», declaró en 2014 a Sindicial.cl.
Su vida y también su trabajo quedaron plasmados en el libro No Somos Nanas. Memorias de Ruth Olate, de la periodista Camila Sáez.
«Cuando la conocí, quedé tan fascinada con ella y su historia, vi que en el sindicato hacían tanto con pocos recursos, y aún así lograban reunirse con autoridades, mover proyectos de ley. Fue fascinante», cuenta Sáez a Fast Check CL.
Pero como presidenta de Sintracap, Olate tenía la intención de regular su trabajo con una ley que le diese garantías de derechos laborales a sus compañeras. Gracias a su gestión, en 2015 entró en vigencia el proyecto por el que luchó.
La ley de trabajadoras de casa particular
Desde 2011 la Organización Internacional del Trabajo (OIT) impulsó el convenio 189, que regulaba la labor de las trabajadoras de casa particular.
Como presidenta de Sintracap, Olate impulsó desde manifestaciones hasta charlas sobre la realidad laboral de las trabajadoras de casa particular, tendiendo lazos con las autoridades y parlamentarios para impulsar una ley que regulara su trabajo basada en el convenio 189.
Finalmente, después de meses de debate en el Congreso, en 2014 el parlamento aprobó un proyecto de ley que regula el trabajo de las trabajadoras de casa particular y en enero del 2015 entró en vigencia. Entre otras cosas, la ley creó un registro de contratos de trabajadoras de casa particular, que estipula también límites de salario mínimo, días libres de las trabajadoras, entre otros puntos.
«Hasta ese momento las leyes laborales discriminaban a las trabajadoras de casa particular. El mismo Código del Trabajo las discriminaba, las dejaba afuera de muchas normas. Esta ley pudo equipar sus derecho a lo de los demás trabajadores», afirma Camila Sáez.
«El legado de Ruth es impresionante. Está plasmado no solamente en la ley, sino en el trato y el cambio generacional que ha habido con el trabajo domestico en Chile. Las trabajadoras de casa particular no tendrían la dignidad que tienen hoy sin su lucha, obviamente aún faltan cosas por avanzar, pero ella fue la punta de lanza para que las respetaran», agrega la autora de las memorias de la dirigenta.
En la red social X, la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, reconoció la labor sindical de Ruth Olate.
La ex ministra del Trabajo y actual alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, también le dedicó unas palabras en su cuenta de X.
«Quiero hacer un alto en la jornada para dedicar unas palabras a Ruth Olate por su partida. Con Ruth, me tocó compartir y trabajar en el proyecto que resguarda los derechos laborales de las trabajadoras de casa particular. Fue una dirigente sindical luchadora, muy perseverante y con gran, gran corazón».