La Universidad Alberto Hurtado anunció que 55 personas habían sido desvinculadas a raíz de la crisis económica que enfrenta, la cual atribuyeron a la gratuidad. Ante esto el sindicato de trabajadores de la UAH, emitió un comunicado acusando que han sido más de 80 los funcionarios despedidos y que la universidad investiga una deuda de $7.600 millones.
Por Fast Check CL
El pasado 18 de julio la Universidad Alberto Hurtado, comunicó internamente que habían desvinculado a 55 funcionarios debido a problemas económicos. Según el comunicado interno, la medida responde a una necesidad de ajustar la estructura organizacional frente a una delicada situación financiera.
El rector de la casa de estudios, Cristián del Campo, indicó que la situación se ve agravada por el sistema de gratuidad en la educación superior, argumentando que los recursos del Estado no serían suficientes para cubrir los costos asociados a las carreras ofrecidas por la universidad.
En respuesta a las declaraciones emitidas por el rector, este miércoles 24 de julio, el Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras de la UAH publicó un comunicado en el que señalan que serían más de 80 los funcionarios desvinculados. Además, acusan que la universidad ha impulsado ” una reestructuración poco transparente, sin dialogar con las y los trabajadores”.
Por otra parte, el gremio relata que los cerca de 90 despidos han sido realizados en ocasiones desde que asumió del Campos como rector de la UAH. En la misma línea, agregan que luego de la salida del anterior rector, Eduardo Silva S.J., comenzó una auditoría que “hasta ahora arrojó una deuda por 7.600 millones de pesos”.
“Las declaraciones entregadas por la directiva se refugian en argumentos que no se sostienen considerando la historia financiera de la universidad, en este punto apuntaron a que solo se evidencia la nula crítica del rector en torno a una gestión financiera y administrativa evidentemente deficiente” se lee en el escrito.
La presidenta del Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores de la Universidad Alberto Hurtado, Cristina Quezada, explicó que ” hemos pagado con nuestros puestos cada uno de los pesos adeudados por la administración anterior. Los despidos han creado un ambiente laboral inestable, que ha instaurado el miedo en la universidad, un espacio educativo donde el patrono es un sindicalista”.