«Con las fronteras no hay que tener ningún tipo de ambigüedad», es lo que señaló el presidente Boric en su reciente visita a la Región de Magallanes, justo después del impasse con los paneles solares argentinos en territorio chileno. Esta polémica develó una frágil y ambigua relación que tienen ambas naciones, y que Fast Check CL indaga en este explicativo.
Por Maximiliano Echegoyen
Las relaciones de Chile con la nación vecina, Argentina, están en un momento ambiguo. No solo por la derrota de la selección ante el equipo liderado por Lionel Messi en la Copa América, sino que por otros conflictos diplomáticos que se han ido sumando en este último tiempo.
El último de estos, de hecho, fue la polémica instalación de paneles solares destinados a una base militar argentina que se encontraba dentro de territorio chileno. Esto significó, inclusive, que el presidente Gabriel Boric elevara el tono: «deben retirar esos paneles solares a la brevedad o lo vamos a hacer nosotros».
La nación trasandina, finalmente, sí retiró los paneles que se encontraban en territorio chileno, pero dejó entrever una política exterior que ha llevado a cabo Argentina desde el último tiempo y que puede repercutir en los intereses de Chile. En este explicativo, Fast Check CL hace una breve recopilación de cómo han sido las relaciones entre Santiago y Buenos Aires.
La polémica reciente: los paneles solares en territorio chileno
Era el 12 de junio cuando Biobiochile publicó un artículo titulado: «Hito 1 Magallanes: Chile reclama a Argentina por construcción militar en territorio nacional». Según lo reportado, nuestro país reclamó formalmente a los trasandinos por una instalación argentina en territorio chileno.
El 29 de abril pasado, la Armada Argentina inauguró la renovación del Puesto de Vigilancia y Control de Tránsito Marítimo Hito 1, en el Cabo del Espíritu Santo, Tierra del Fuego. La instalación está pegada al límite con Chile y parte de esta, unas pantallas fotovoltaicas que proporcionan electricidad, sobrepasaron 3 metros la frontera. Es decir, Argentina utilizó 3 metros de territorio chileno para sus fines.
Había pasado más de un mes cuando los medios de comunicación empezaron a cubrir el tema. Tal fue el punto, que el presidente Gabriel Boric en su gira en Europa señaló que si bien recibieron disculpas de la Cancillería argentina, también habló con su par, Javier Milei, para quitar los paneles solares en territorio chileno.
«Con las fronteras no es algo con lo que se pueda tener ambigüedades y que es un principio básico del respeto entre países y que, por lo tanto, deben retirar esos paneles solares a la brevedad o lo vamos a hacer nosotros», indicó el mandatario en aquella ocasión.
Finalmente, estos paneles solares fueron desmontados y retirados. El embajador argentino en Chile, Jorge Faurie, señaló que no está en duda que el Estrecho de Magallanes «es algo valioso y está claro que es chileno».
Los puntos de fricción con Argentina
Para comprender el tipo de relación que Chile ha cultivado con Argentina, Fast Check se contactó con John Griffiths, doctor en Estudios Americanos y jefe de Estudios de Seguridad y Defensa Athenalab. Según el experto, hay que «resolver puntos de fricción que pueden estar afectando la posibilidad de eliminar puntos contenciosos que se van repitiendo cada cierto tiempo».
El experto rememora la declaración de Argentina en su política de defensa del año 2021, que se refiere a una soberanía compartida en el Estrecho de Magallanes con Chile. «A nosotros nos respaldan los tratados. El Estrecho de Magallanes no es compartido, es completamente del Estado de Chile en virtud del tratado de 1881, por lo cual nosotros entregamos la mitad de la Isla de Tierra del Fuego». Por lo mismo, a Griffiths le parece a lo menos «curioso» la instalación de un punto de monitoreo en el Hito 1.
Entre otros puntos de fricción que tiene Chile con Argentina, está la plataforma continental austral y las pretensiones de los trasandinos de querer el control binacional del Estrecho de Magallanes, según lo señalado por Francisco Abarzúa, geógrafo UPLA y diplomado en la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos.
¿Estrecho de Magallanes binacional?
En julio de 2021, mientras en Chile estaba el presidente Sebastián Piñera en el poder y al otro lado de la cordillera Alberto Fernández, se publicó el decreto 457/2021 en Argentina, el cual establecía que es «fundamental continuar fortaleciendo la exploración, estudio y control conjunto sobre el Estrecho de Magallanes y el Mar de Hoces (Mar de Drake)».
El decreto indica que el Estrecho es un espacio estratégico, debido a «su rol como vías navegables naturales entre el Océano Atlántico y el Océano Pacífico» y «por constituir puntos privilegiados de acceso al continente antártico».
Tras la publicación del documento, el Canciller de aquel entonces, Andrés Allamand, le recordó a Buenos Aires que el Estrecho de Magallanes es territorio chileno, por lo que no se acepta la política binacional que la Casa Rosada pretendía. Tras la queja chilena, al otro lado de la cordillera indicaron que corregirían el decreto.
Es por esta razón que en Chile ha hecho tanto ruido la acción trasandina de instalar los paneles solares tres metros dentro de nuestro territorio. Y si bien estos ya fueron retirados y los argentinos asumieron que se trató de un «error», lo cierto es que las relaciones entre ambas naciones están en un momento ambiguo.
Por ejemplo, el pasado 20 de junio, El Mostrador dio a conocer que autoridades argentinas impidieron que camioneros chilenos ingresaran a su territorio por el paso Cardenal Samoré (a la altura de Osorno).
Según lo reportado, la aduana trasandina aplicó una normativa sobre la dimensión de los camiones de carga, la cual si bien fue anunciada a inicios de junio, su puesta en marcha sucedió después de que el presidente Boric emplazara a la Casa Rosada a quitar los paneles solares en territorio chileno.
A 40 años del Tratado de Paz por el conflicto del Beagle
Los recientes impasses se han dado en un contexto que tiene más ingredientes. No solo por el hecho de que ambos países están siendo gobernados por presidentes con ideologías completamente opuestas, sino porque este año se cumplen 40 años de la firma del Tratado de Paz que terminó con el conflicto del Beagle.
En 1984, Chile y Argentina firman el Tratado de Paz que resuelve la disputa territorial por las islas que se encuentran en el Canal Beagle. Sin la mediación del Vaticano, la guerra entre ambas naciones, lideradas por dictaduras militares en ese entonces, era inminente.
Sin embargo, el último impasse diplomático puede que repercuta en una conmemoración sobria entre ambos países, sin la presencia de Boric ni de Milei.
Este hito habría sido una buena excusa para ambos presidentes de sostener reuniones bilaterales. Si bien ideológicamente son opuestos, lo cierto es que Milei no ha tenido mayores conflictos con el mandatario chileno, ya que, es importante recordar, que el presidente argentino tiene acumuladas varias confrontaciones con distintos presidentes, como Gustavo Petro (Colombia), Lula da Silva (Brasil) y Pedro Sánchez (España).
A lo más, en una entrevista realizada en enero pasado, Milei mencionó, respecto a Gabriel Boric, que le parece que es «alguien que tiene las ideas incorrectas desde mi punto de vista».
Según John Griffiths, es necesario mantener una buena relación con Argentina, ya que «una relación sana a futuro pasa por resolver los problemas que existen». Aunque esto no significa que Chile no deba «tener una postura firme, concreta y resuelta respecto a lo que es nuestro interés nacional y nuestra soberanía».
Lo cierto es que, tras la polémica de los paneles, el presidente Boric realizó una gira por la Región de Magallanes, en donde volvió a reiterar la importancia de respetar la soberanía del país, tras señalar que «con las fronteras no hay que tener ningún tipo de ambigüedad». ¿Podrá la Argentina de Milei y el Chile de Boric sobreponerse a sus intereses personales?