El pasado domingo se dio por finalizada la Cumbre de la Paz por Ucrania. En dicha instancia, el Mandatario firmó el compromiso junto a gran parte de los participantes, sin embargo, otros países de la región no se sumaron a la declaración, entre ellos se encuentran: Brasil, México y Colombia.
Por Fast Check CL
El Presidente Gabriel Boric, el pasado domingo, se adhirió a la declaración final impulsada en la Cumbre de la Paz por Ucrania. El Mandatario se unió a los 80 países que firmaron el compromiso.
Por otra parte, fueron 13 los países que no se sumaron a la declaración, entre los que destacan: Brasil, México y Colombia.
Cabe destacar que la presencia del Jefe de Estado en esta instancia, generó la crítica de los sectores de izquierda de la región, y del Partido Comunista (PC) de Chile. El argumento entregado por quienes se oponían a la instancia, es debido a que la cumbre era un espacio de apoyo a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El presidente de Bolivia, Evo Morales, subió a sus redes sociales dos fotografías de Zelensky: una junto al Mandatario de Argentina, Javier Milei; y otra con el presidente Gabriel Boric. En el texto, Morales, comenta que “nos preocupa mucho que líderes de nuestra región se sumen a la lógica guerrerista de la OTAN. Esa alianza militar es una amenaza para la paz y la seguridad internacional”.
Ante los cuestionamientos, el Presidente Boric, enfatizó en que “esta cumbre y estas convicciones no tienen que ver con la OTAN, no tienen que ver con ideas políticas de derecha o de izquierda”.
Sobre lo mismo agregó que “se trata de que el respeto al derecho internacional y a los derechos humanos es un principio fundamental para nuestra convivencia, y esto es aplicable en Ucrania, en Gaza y en cualquier otro conflicto del mundo”.
Sin embargo, en qué consiste la declaración firmada que ha causado la crítica de otros países de la región y del PC.
¿En qué consiste la declaración?
La declaración de La Cumbre de Paz de Ucrania recoge los temas en los que hubo consenso: la seguridad nuclear y de tránsito marítimo, así como la liberación de los prisioneros de guerra.
El primer punto de los tres temas, es sobre el uso seguro de la energía nuclear, teniendo en cuenta consideraciones medioambientales y las amenazas de uso de armas nucleares que son inadmisibles. Ante esto, la declaración pide que Ucrania tenga “pleno control soberano” sobre la central nuclear de Zaporizhia, la mayor de Europa.
El siguiente punto aborda el tema de la seguridad alimentaria, la cual depende de la producción y el suministro ininterrumpido de productos. Es ahí donde entra el Mar Negro y la garantía de seguridad de la navegación comercial allí.
“Los ataques a los navíos mercantes en puertos o a lo largo de las rutas, así como contra puertos o infraestructuras portuarias civiles, son inaceptables”, sostiene la declaración.
Finalmente, el tercer punto es sobre el alcance humanitario: un llamamiento a liberación de todos los prisioneros de guerra, a través de una operación de intercambio entre quienes están en manos de Rusia y Ucrania, respectivamente.