Donald Trump será conocido como el primer expresidente de Estados Unidos en ser juzgado penalmente, en medio de acusaciones de encubrimiento, testimonios de figuras clave y la sombra de las elecciones de 2016. Un proceso que no solo determinará la culpabilidad del exmandatario, sino que también podría impactar en el panorama político de Estados Unidos de cara al futuro y las elecciones presidenciales.
Por Fast Check CL
Durante la jornada de hoy, Donald Trump se enfrenta a un juicio penal, marcando un hito histórico como el primer expresidente de EE.UU. en hacerlo. El caso se centra en el dinero pagado a la ex actriz porno Stormy Daniels, cuyo nombre real es Stephanie Clifford, para silenciar un supuesto encuentro sexual, una acusación que Trump ha negado enérgicamente.
El juicio presenta a Trump como acusado principal, mientras que figuras clave como Stormy Daniels y su exabogado Michael Cohen están listos para testificar. El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, dirige la acusación, alegando un intento de encubrimiento de este suceso para influir en las elecciones de 2016.
Detalles del juicio
La imputación en contra Trump ,se centra en el delito de falsificación de documentos para ocultar un pago de 130.000 dólares efectuado por su entonces abogado Michael Cohen a Daniels, en los días finales de la campaña presidencial de 2016. Este pago tenía como objetivo comprar su silencio respecto a un encuentro sexual que ella afirmó haber tenido con él en un hotel de Lake Tahoe en 2006.
Vale destacar que el juicio contra el exmandatario no solo implica cuestiones legales, sino que también tiene implicaciones políticas significativas. Con las elecciones estadounidenses acercándose, el resultado podría influir en la campaña y en la futura carrera política de Trump, ya que cuenta con otros tres casos penales estancados por disputas legales.
A medida que el juicio avance, se espera que surjan nuevas revelaciones y debates sobre la conducta pasada de Trump y su idoneidad para el cargo. Independientemente del resultado, este caso marcará un momento definitorio en la historia política moderna de Estados Unidos, tomando en cuenta que, según consigna La Tercera, una encuesta de Reuters/Ipsos reveló que cerca del 65% de los votantes consideraban los cargos en el caso como al menos algo serio. Entre los republicanos, uno de cada cuatro, y la mitad de los independientes, expresaron que no respaldarían a Trump si fuera declarado culpable de un delito grave.