En redes sociales se compartió que «si las llamas (de la cocina) son naranjas/rojas, te están vendiendo gas mezclado con una dosis más alta de oxígeno». Fast Check CL calificó como falsa la información, pues distintos expertos explicaron que esto no es posible. En realidad, las llamas naranjas muestran que el quemador está sucio o puede estar mal regulado.
Por si tienes poco tiempo:
- En redes sociales se aseguró que «si la llama es azul, todo está bien mezclado el gas (…). Si las llamas, en cambio, son naranjas/rojas, te están vendiendo gas mezclado con una dosis más alta de oxígeno».
- Fast Check CL consultó a expertos, quienes aseguraron que la afirmación es falsa. Las llamas naranjas se dan porque el quemador puede estar sucio o el regulador de aire está tapado o desplazado.
Por Isidora Osorio
En redes sociales (1,2,3,4,5,6,7) se compartieron dos imágenes, la primera muestra las llamas de fuego de una cocina azules y la otra más anaranjadas. A raíz de esto se aseguró que en este último caso les vendieron gas mezclado con oxígeno y por ese tiene ese color.
«Presten mucha atención al color de las llamas de los fogones. Si la llama es azul, todo está bien mezclado el gas y la temperatura de la llama es de alrededor de 1500-1700 grados Celsius. Si las llamas, en cambio, son naranjas/rojas, te están vendiendo gas mezclado con una dosis más alta de oxígeno, dando como resultado una temperatura de llama más baja alrededor de 900-1200 grados Celsius y por lo tanto más consumo de gas para calentar los mismos pisos», aseguran en las publicaciones.
Sin embargo, Fast Check CL al consultar a expertos pudo comprobar que la información es falsa, ya que, el hecho que las llamas estén de color naranjo se debe a un problema en el regulador o que el quemador está sucio, pero no a la venta de gas mezclado. Además, el número de las temperaturas está malo.
El balón de gas no trae oxígeno
Fast Check CL lo primero que hizo fue investigar si el gas licuado- más utilizado por los chilenos para uso doméstico- efectivamente contiene oxígeno, pudiendo comprobar que no, en realidad está compuesto por hidrocarburos.
De acuerdo a una asesoría técnica para el Congreso, el gas licuado o natural está compuesto por butano y propano «que pueden obtenerse como un derivado del procesamiento del gas natural y, además, como un subproducto de la refinación del petróleo crudo en las plantas de fraccionamiento».
Coincide con esto Lipigas y Gasco, desde donde explican que «es un combustible que proviene de la mezcla de dos hidrocarburos principales: el propano y butano. Es obtenido de la refinación del crudo del petróleo o del proceso de separación del crudo o gas natural en los pozos de extracción».
Además, este medio se contactó con José Romero, académico de Ciencias Químicas de la Universidad de Chile, quien aseguró que «el gas licuado no contiene oxígeno, de hecho esto científicamente no es posible».
De igual manera, la Superintendencia de Electricidad y Combustible (SEC) explicó a Fast Check CL que «el gas licuado de petróleo (GLP), es un combustible gaseoso para uso doméstico, industrial o vehicular, el cual no contiene oxígeno en su composición, pues sus componentes son propano, butano, pentano y otros gases pesados, es decir, está compuesto solo por gases para uso como combustible».
¿A qué se debe el color de las llamas?
De acuerdo a los expertos, el color de las llamas sí habla de un problema con el oxígeno, pero no tiene que ver con el gas que se compra, sino con el regulador y la suciedad del quemador.
Por ejemplo, José Romero explicó que las llamas más naranjas «pueden mostrar que el quemador está sucio o puede estar mal regulado, esto significa que lo que va abajo del quemador no permite la correcta salida de oxígeno».
La SEC, por su parte, mencionó que «los colores amarillos/anaranjados de una llama, se obtienen cuando no existe la cantidad de aire necesaria para efectuar la combustión completa, hecho que se asocia con la reducción de la cantidad de aire-primario, o bien podrían haberse originado por algún residuo de algún producto químico que se haya utilizado para la limpieza de los quemadores o de la misma cocina».
«La mezcla aire – combustible (gas + oxígeno) se produce al momento de abrir el paso de gas, el que junto con el aire del ambiente y, al acercar un fósforo o chispero, da origen a la llama», agrega.
Lipigas coincide con esto. En su sitio web afirma que «si esta mezcla de gas – aire no es la adecuada, la llama es débil y de color naranja-amarilla, se debe a que por posibles derrames de alimento en el plato o por efectos de la limpieza del mismo, se haya tapado o desplazado el regulador de aire, por lo que hay menos acceso de aire, creando esta combustión incompleta».
«En este proceso, el color naranja indica la presencia del Monóxido de Carbono, el cual al enfriarse en los recipientes como la olla o tetera forma el “hollín” que los tiñe. Además, esto afecta la economía casera, pues hay una pérdida de energía, haciendo que el cilindro dura menos y se dice que el gas calienta poco», agrega.
Conclusión
Fast Check CL calificó como falsa la información, pues el gas licuado no contiene oxígeno. El hecho que las llamas estén anaranjadas se debe a un problema en el regulador de aire y/o que el quemador está sucio y dificulta el paso de oxígeno.